En primera línea de mar en Barcelona, esta nueva sede para una startup tecnológica ocupa una planta completa de un edificio contemporáneo, completamente acristalado. La amplitud visual —abierta al Mediterráneo, a la ciudad y a la montaña de Montjuïc— marca el carácter del proyecto desde el inicio. El espacio, concebido como plataforma para el crecimiento continuo de la empresa, debía integrar áreas de trabajo abiertas, despachos, phone booths, salas de reunión, una cantina y zonas polivalentes para el descanso y la interacción del equipo.

La intervención respeta y potencia los elementos constructivos preexistentes: forjado de hormigón visto, suelo técnico y cerramientos perimetrales de vidrio. Sobre esta base, se instala un pavimento modular de moqueta sintética que define un ambiente cálido y reduce el ruido, favoreciendo la concentración en un contexto de actividad intensa. La iluminación, resuelta con regletas LED dispuestas en patrones gráficos, introduce ritmo y responde tanto a las necesidades funcionales como al imaginario visual de la empresa.

La madera de pino barnizada, presente en el mobiliario y revestimientos, introduce una dimensión cercana y artesanal, alineada con el espíritu directo y resolutivo del cliente. En los espacios de descanso y en la cantina, referencias al mundo del deporte —texturas, colores, materiales— refuerzan la cultura de equipo, desafío y superación que define el día a día de esta joven empresa en expansión.